Lugares imprescindibles |
1. Museo temático, antigua Central "Hershey" en Jibacoa y Canasí
Era el año 1916 y la Primera Guerra Mundial en Europa, dejó a Milton S. Hershey con poco azúcar para su producción de chocolate. Para complementar esto, Hershey comenzó a adquirir unas plantaciones y un molino de azúcar y a construir refinerías en Cuba para asegurar el suministro para su fábrica en Pennsylvania.
Cerca de las plantaciones, Hershey construyó una pequeña comunidad, llamada la Central "Hershey". La construyó para sus trabajadores para que no tuvieran que viajar tan lejos. La Central era más o menos una copia de la comunidad que se había construido para los trabajadores de Hershey en Pennsylvania, mostrando un pronunciado estilo estadounidense de casas con chimenea - a pesar del clima tropical en Cuba -. La Central incluyó un centro médico totalmente equipado, una farmacia bien surtida, un supermercado equipado con refrigeradores, una escuela pública y gratuita para los niños, un club deportivo con varias instalaciones como un campo de béisbol y un campo de golf y una planta de energía para el suministro de electricidad. Un lujo para muchos de los trabajadores cubanos que antes de la llegada de Hershey ni siquiera tenían electricidad. Además de la Central, Hershey instaló una línea ferroviaria para servir como transporte para los trabajadores que vivían en las poblaciones cercanas.
Todo esto porque Hershey creía que un trabajador feliz y con buena salud rinde mejor. La manera de Hershey de hacer negocios en Cuba contrastó con la mayoría de los empresarios extranjeros que explotaban los recursos de la isla y de su gente. El gobierno cubano honró y premió a Hershey muchas veces por ello, incluso con el más alto honor: la Gran Cruz de la Orden Nacional.
Sin embargo, todo esto llegó a su fin después de la Segunda Guerra Mundial. En ese momento la empresa tenía plantaciones suficientes en los Estados Unidos y llegó a la conclusión de que ya no necesitaba el azúcar cubano. Todas las fábricas y propiedades, incluyendo el ferrocarril, fueron vendidas a la Empresa Azucarera Cubana-Atlántico. Lo que queda ahora del imperio de chocolate es el Ferrocarril Central Hershey, la última línea de tren eléctrico en Cuba y el museo.
La estación de trenes de Casablanca, cerca del muelle del ferry, en La Habana, es la estación del único ferrocarril eléctrico en Cuba. Fue construido en 1917 por la empresa de chocolate Hershey y hasta hoy el tren eléctrico cubre la misma ruta, cinco veces al día: a través de Guanabo (0,80 CUC, a 25 km), La Habana (1,45 CUC, 46 km), Jibacoa (1,65 CUC, 54 km ), Canasí (1,95 CUC, a 65 km) y Matanzas (2,80 CUC, a 90 km). En general, el tren sale de Casablanca a tiempo, pero a menudo llega con alrededor de una hora de retraso. Es un espectacular viaje de cuatro (o cinco) horas. Los billetes se pueden comprar en la estación de trenes de Casablanca. El fin de semana y días de fiesta el tren puede estar lleno y es mejor comprar el billete con antelación.
Recordamos muy bien la primera vez que visitamos Cuba y preguntamos para hacer un viaje en este tren. Nos parecía algo bohemio, único y una manera diferente de descubrir tan linda región, no obstante, todo el mundo nos desaconsejo tal viaje por su lentitud. Próximamente lo haremos para poder informar en www.casa hostal cuba.com que tal es la experiencia. Si tienes la oportunidad anímate y no te dejes impresionar por el aspecto de la estación de tren, recuerda que en Cuba todo va más despacio. En la galería de fotos de www.casa hostal cuba.com podrás ver fotos de los trenes que recorren Cuba, auténticas piezas de museo al igual que muchos coches.
2. Fábrica Ron Havana Club en Chipiona
Cerca de Santa Cruz del Norte está la fábrica de ron más grande de América Latina, donde desde 1975 se producen cada año dos millones de cajas del famoso Havana Club, en todas las variantes. En 1919 la fábrica fue construida como una pequeña destilería y refinería en el pueblo pesquero de Chipiona. Desde 1975, como resultado de la reorganización gubernamental de la industria del ron cubano, la fábrica hace y embotella el ron Havana Club, la marca fundada en Cárdenas en 1878 por el vasco José Arechabala. El mafioso Al Capone era un visitante regular durante la época de la Ley Seca estadounidense.
En la visita a la fábrica un experimentado guía te mostrará todas las instalaciones en las que se puede ver la parte antigua sin modificaciones que aún sigue en operación – con los mismos sistemas de fermentación y destilación - y las más recientes adiciones a la fábrica, donde se usa la más avanzada tecnología para extraer este maravilloso producto de la caña de azúcar cubana.
También podrás comprar unas botellas de esta bebida espirituosa que a buen seguro muchos de tus amigos o familiares sabrán apreciae. Te aconsejamos que te informes con cuantas botellas puedes entrar en tu país de origen. Hemos de decir que no recordamos tener una resaca de este ron seguramente que por su carácter natural, ya que durante nuestros viajes tuvimos varios días en los cuales bebimos y bailamos, las cantidades que tomamos no fueron muy prudentes.
Desde casahostalcuba.com te recomendamos que si conduces no bebas, si tienes un accidente de coche en Cuba estarás metido en un buen problema, ten mucho cuidado con esto, Cuba tiene una legislación muy estricta en este sentido y puedes ir a la cárcel.
3. Puente de Bacunayagua cerca de Santa Cruz del Norte
El puente de Bacunayagua, inaugurado en 1959, cruza el profundo cañón que corta la línea de costa a la altura del Valle de Yumuri (justo enfrente al estrecho de Florida). Con 110 metros de altura es el puente más alto de Cuba. Por el lado de La Habana hay un restaurante con una terraza de observación y un bar desde donde se puede disfrutar mientras te tomas un piña colada de unas vistas impresionantes sobre el valle.
Cuba es rica por su variedad de paisajes y diversa orografía. Observar este valle por si aún no lo habías sentido te va meter de lleno en la naturaleza tropical, verde por por donde mires.
Aquí también podrás encontrar un puesto de artesanía que vende recuerdos, aunque algo caros.
Dirección: Vía Blanca, cerca de Bacunayagua.
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