Este restaurante no es encantador desde el exterior, pero no debemos dejarnos engañar por su fachada. Hay muchos platos diferentes y todo esté delicioso. El servicio es eficiente y nos dan buena calidad por lo que se paga. Sin duda es un buen sitio para cenar en La Habana.
Dirección: Línea 753, entre Paseo y 2
 
 

Si no fuera por Ernest Hemingway, La Bodeguita podría no ser tan famosa. Se debe a las famosas palabras de Hemingway "Mi mojito en La Bodeguita, mi daiquiri en El Floridita." por lo que La Bodeguita es una parada obligada para cualquier turista que visite La Habana.

Doña Eutimia es un pequeño “paladar” (restaurante privado), tal vez no es el restaurante más glamuroso, pero si se quiere probar la cocina auténtica cubana, aquí es donde hay que ir.
La comida es excelente, las porciones son abundantes y los precios económicos. Favoritos absolutos son Ropa Vieja y mojitos congelados. Mejor tener una reserva, porque el lugar suele estar lleno.
Dirección: Callejón del Chorro 60C (cerca de Plaza de la Catedral)
 

Al lado de la Plaza de Armas, en Habana Vieja, se encuentra este hotel en el que Ernest Hemingway escribió "Por quién doblan las campanas". Destacan sus vistas desde el ático y su ascensor de los años 30. 

Ubicado en el corazón de Miramar ( La Habana ), a tan sólo 150 m. de la playa, este restaurante te ofrecerá suculentos platos y deliciosos vinos.
Conviene reservar con antelación.

Ubicado en Nuevo Vedado (La Habana), este romántico restaurante se encuentra rodeado por un magnífico jardín que no olvidarás.